La inversión inmobiliaria es un viaje al que yo recomiendo lanzarse, se trata de un proceso en el que la persona toma decisiones básicas y el resultado de esas decisiones puede aplicar muy bien a diversos aspectos de su vida porque se está dando un salto importante de una orilla del río a otra.
Cuando inviertes hay que aprender a cambiar el pensamiento de consumidor por el de inversionista, uno se enfoca en el corto plazo y el otro en el largo plazo. Estamos acostumbrados a vivir bajo el esquema del día a día, pero el inversor no vive así, el inversor apunta siempre hacia el futuro.
Las buenas inversiones se hacen con visión de futuro eso te permitirá tener una rentabilidad mayor.
A razón de ello comienzas a dar pasos firmes:
- Decides invertir por una razón específica, con un propósito y en orden.
- Estableces metas u objetivos a lograr.
- Entiendes la importancia de pensar con la cabeza y prestar atención a los detalles que hablan por sí solos.
- Te educas para invertir, porque no solo se trata de poner el dinero en un proyecto y listo, debes saber que existen muchas alternativas y es preciso identificar la que mejor se adapte al estilo personal.
¿Quién es un buen inversionista?
- Quien construye un portafolio de inversión de calidad
- Quien desarrolla su visión a futuro
- Quien no deja la calculadora por fuera de sus negociaciones
¿Tienes lo necesario para convertirte en un inversor inmobiliario de alta calidad?